Tratamiento para un madridista "tipo"

Conozco a un madridista tipo aunque hace muy pocos años no lo era. Entonces sus mismos correligionarios le consideraban un extremista,  enfermo de paranoia.

  “¿Se ha puesto Villar la camiseta del Barcelona en un fiestorro de su presidente? ¿No, verdad?” preguntaban, intentando hacerle razonar.

Luego llegó el Villarato, o lo que fue peor, Messi fue mejorando y mejorando y mejorando, para colmo, Pep le encontró otra posición y también a Xavi, ambas mucho más efectivas. Y Busquets que cortaba y al primer toque la pasaba y Pedro que además de presionar, marcaba.

En esas llegó Mourinho que se creía no sé qué por haber eliminado al Barça con el Inter y con mucha suerte.  Hay que considerar que esa eliminación del Barça por el Inter  fue la única gran satisfacción internacional que en años tuvieron los madridistas. Para los culés los Lyonazos o el chorreo de Liverpool solo fueron  buenos chistes porque las verdaderas satisfacciones se consiguieron con títulos y, además, muy buen juego.

1ª Temporada de Mourinho: De cinco enfrentamientos con su máximo rival ganó uno  e hizo el ridículo en varios. Incluso en la segunda parte y prórroga en ese que ganó con la complacencia del árbitro y que le valió el titulillo que en cuestión de meses había pasado a ser titulazo. Como la temporada anterior el Real Madrid había sido peor que  Sevilla, Atlético y Barça, pues todos ellos habían conseguido algún título y él no, la afición consideró excelente la temporada de Mourinho, cuando lo único excelente fue el lavado de olla que el técnico había conseguido en presidente y aficionados. LQDM. Palabra del Señor.

  Volvamos al madridista tipo que conozco, que hoy hasta es tildado de tibio: Como quiérase que conozco bien la enfermedad porque la vi padecer a muchos culés durante tres décadas (máomeno 1960-1990), la puedo diagnosticar con exactitud y recomendar el tratamiento adecuado para que el enfermo vuelva a la normalidad:

n      Ligera gimnasia matutina.

n      Usar prendas y calzado confeccionados con materias naturales.

n      Comer sano y mucha fibra.

n      Dar un paseito a la caida de la tarde.

n      Evitar los excitantes, nada de alcohol.

n      Cenar poco.

n      Rezarle a la divinidad o subdivinidad pertinente.

n      Dormir en sitio ventilado en una cama ni demasiado dura ni demasiado blanda.

Además de estas generalidades el enfermo evitará no solo cualquier medio de comunicación sino también todo tipo de gente que pudiera hablarle de los deportes de equipo más practicados. Si por causas profesionales debe coincidir con ese tipo de gente alegará sordera o mudez o, simplemente puede remitirse a esta prescripción.

Evitará también todo contacto con la Batidina,  el Villaratol o la Uefina.

 Ciertos científicos orientales aseguran que la repetición de mantras como “el mejor del siglo pasado” pueden aliviar al paciente, pero nosotros lo desaconsejamos por sus desastrosos efectos posteriores que se hacen notar principalmente en primavera, precisamente cuando necesita más fortaleza psíquica para afrontar la terrible crisis anual, pues en la mayoría de pacientes esta enfermedad es crónica.

Especialmente cuidadoso se debe ser con los puntuales y momentáneos accesos de euforia, causa de casi irremediables recaídas  que se manifiestan dentro del mismo mes.

 Sin embargo, si el paciente sigue al pie de la letra el tratamiento y si tiene suerte podemos asegurar la curación para 2020, año en el que Messi fichará por el M.C. 

 De nada, madridistas.

Foot foot